La Iglesia Adventista del Séptimo Día en Interamérica organizó hace poco un simposio virtual de salud para más de 2500 profesionales de salud y obreros de la salud que prestan servicios a la red de 14 hospitales y 21 clínicas del territorio. El simposio fue el primer evento en todo el territorio que buscó ayudar a que los profesionales de salud comprendan la filosofía, la historia y las particularidades del ministerio adventista abarcador de salud, además de presentar una visión general de las instituciones de salud en toda Interamérica.
Es importante conservar una cultura de promover la salud y el bienestar de manera sistemática como parte esencial de nuestras creencias como adventistas, dijo el doctor Franck Généus, director de ministerios de salud de la Iglesia Adventista en Interamérica y presidente de Servicios Adventistas de Salud Interamérica (AHS-IA), quien también es el principal organizador del simposio.
El simposio virtual también apuntó a los profesionales adventistas de salud y sus colegas que trabajan fuera de la organización adventista, enseñándoles maneras prácticas de compartir el mensaje adventista de salud allí donde trabajan.
Bajo el lema, “Logrando la misión de Dios mediante el ministerio abarcador de salud”, el evento que se llevó a cabo del 7-8 de abril de 2022 desafió a los profesionales de salud, líderes de la iglesia y miembros en general para que sean instrumentales en su ministerio individual, demostrando maneras prácticas de compartir el mensaje de salud también mediante actividades de impacto comunitario.
Impacto global del ministerio de salud
El doctor Peter Landless, director de ministerios de salud de la Iglesia Adventista mundial, destacó que el alcance del mensaje adventista de salud es global, y que la iglesia ha sido reconocida como la red principal de base religiosa en el mundo protestante. La iglesia administra y opera mil instituciones de salud con más de 36 mil camas y 78 mil empleados, y cada año recibe a 1,5 millones de pacientes de internación y 20 millones de pacientes ambulatorios, además de brindar mil millones de dólares por año en obra benéfica. “No es algo insignificante”, dijo el doctor Landless, y esto ha revolucionado el mundo.
El doctor Landless señaló a los asistentes que no deberían ser tan solo médicos misioneros en los hospitales y clínicas sino también en el hogar y la comunidad.
“No olvidemos jamás que existe un vínculo entre la salud y la salvación, y que el Espíritu de Dios usa la sanación para llegar al corazón de la gente y revelar su amor y salvación”, dijo el doctor Landless. Es un ministerio combinado, dijo del ministerio abarcador de salud que sigue la iglesia. “Tenemos que alcanzar a los hombres y mujeres, para ayudarlos donde sea necesario a ministrar a los enfermos y a los sufrientes, tanto física como espiritualmente. Implica suplir las necesidades de las personas a la vez que se les revela el amor de Dios. “Tenemos un mensaje [de salud], tenemos un mandato, tenemos un método, y es importante que tengamos un ministerio y una misión”, dijo Landless.
Cada miembro se convierte en un ministro de la salud
Cada miembro se convierte en un ministro de la salud o un médico misionero, compartiendo esperanza, salud, y sanación –un enfoque integral, dijo él. Cada iglesia tiene que ser un centro para brindar información de salud útil más allá de la recuperación del estrés, cocina saludable, ejercicio, recuperación de las adicciones y más, añadió Landless. “Tenemos un mensaje, tenemos una opción, tenemos una herramienta y tenemos un ministerio”, expresó.
Landless apeló a los profesionales de salud para que sigan un estilo de vida saludable para dar mejor testimonio a los que los rodean. “Cuanto más perfecta sea su salud, más perfecta será su labor”, dijo. “Si no tiene tiempo de estar bien, tiene que hacerse el tiempo para ello”.
El pastor Lowell Cooper, ex vicepresidente general de la Iglesia Adventista mundial, reflexionó sobre el ministerio abarcador de salud y su papel en la misión de Dios.
Devotos a la sanación y el servicio como los de Cristo
Cooper repasó dos de las seis metodologías que la iglesia ha definido para trabajar en el mundo: vivir como Cristo, comunicarse como Cristo, discipular como Cristo, enseñar como Cristo, sanar como Cristo y servir como Cristo.
Al sanar como Cristo, es importante afirmar los principios bíblicos del bienestar de toda la persona, haciendo una prioridad vivir sano y la sanación de los enfermos, los pobres y los oprimidos en cooperación con el Creador en su obra compasiva de restauración, leyó.
Al igual que en los tiempos bíblicos, hay personas marginadas en la sociedad, sufriendo por la pobreza, la guerra, las calamidades naturales, del abuso, el quebrantamiento, el fracaso, el temor al aislamiento, la enfermedad, la pestilencia y la desesperanza, añadió Cooper. “Nuestro ministerio en este trabajo no se encuentra tan solo en el ámbito de las ideas y doctrinas; también se demuestra en acciones, actos de misericordia, sanación, justicia, equidad, perdón y compasión”.
“Al seguir el ejemplo de Jesús, nos comprometemos a un servicio humilde, a ministrar a los individuos y las poblaciones más afectadas por la pobreza, la tragedia, la desesperanza y la enfermedad”, añadió.
La Iglesia para la misión divina
Cooper desafió a los profesionales de salud para que piensen más en la misión como la misión de Dios. “Creo firmemente que Dios no tiene una misión para la iglesia tanto como que Dios tiene una iglesia para la misión”, dijo. Alcanzar la misión de Dios mediante los ministerios abarcadores de salud abarca la atención de toda la persona; tiene que ver con un ministerio y no simplemente con una metodología; se preocupa con el bienestar y no solo con tratar enfermedades, busca un sistema de atención que abarca el bienestar físico, social, espiritual y mental, y es un ministerio de colaboración no solo dentro de la iglesia sino con otras organizaciones comprometidas con el desarrollo de la comunidad, explicó.
Vivamos el mensaje de salud que hemos recibido, pensemos con cuidado y detenimiento sobre una teología del sufrimiento, y crezcamos en la práctica de salir a encontrarnos con las comunidades que nos rodean”, fue el desafío de Cooper.
El pastor Elie Henry, presidente de la División Interamericana, agradeció a los cientos de profesionales de salud que prestan servicios en los hospitales y clínicas del territorio, por su papel fundamental a la hora de brindar atención y ministrar a los pacientes y las comunidades que los rodean. “Es importante que nos reunamos y veamos de qué manera mejorar nuestro servicio a Dios e influir a las personas para que comprendan que Dios tiene un interés especial en todos nosotros, en nuestra salud”, expresó.
El doctor Elie Honore presentó una breve reseña histórica del ministerio abarcador de salud durante los últimos 74 años, además de un segmento especial que lo reconoció a él por sus más de treinta años de dedicado servicio a los ministerios de salud de Interamérica. Asimismo, el programa en línea contó con una sesión de preguntas y respuestas.
El simposio fue el primero de una serie de encuentros especializados de capacitación que seguirán dedicados a las enfermeras, los médicos, los terapeutas, los psicólogos, los farmacéuticos y los técnicos de laboratorio, en los próximos meses y año.
Por Libna Stevens, Noticias de la División Interamericana
Fuente: https://www.interamerica.org/es/
