El contador Paul H. Douglas atribuye su educación en la Northern Caribbean University (NCU) en Jamaica como la base de su carrera de 40 años en la Conferencia General de la Iglesia Adventista del Séptimo Día, con sede en Silver Spring, Maryland, Estados Unidos. Se desempeña como tesorero desde 2021.
“No existe una base como la que se obtiene aquí en la Northern Caribbean University”, dijo Douglas durante su discurso en la ceremonia de graduación número 101 de la institución el 11 de agosto, celebrada en el campus de Mandeville, Jamaica. Durante la ceremonia recibió el título de Doctor Honoris Causa en Comercio.
Douglas también atribuyó el desarrollo de su carrera a la mano guía de Dios. Utilizó la historia de su carrera profesional para resaltar cómo la sumisión a la guía divina puede hacer que uno alcance sueños y propósitos. Hablando bajo el tema de graduación “Capacitados para la excelencia… Preparados para la grandeza”, Douglas preguntó a la clase: “¿Cuál es su historia?”
“¿Sabes quién eres, qué quieres y hacia dónde vas?” preguntó, animando a los graduados a plantearse preguntas serias y transformadoras: “¿Por qué a mí, por qué ahora y para qué?” en cada situación y momento de sus vidas.
Cuando era joven, Douglas se graduó de Kingsway High School, una institución secundaria adventista en Jamaica en 1982. Había estudiado ciencias y, aunque su padre era pastor, Douglas se estaba preparando para seguir una carrera médica. Mientras estaba matriculado en lo que entonces se conocía como West Indies College, lo animaron a realizar el curso preuniversitario de contabilidad. Tuvo éxito en ese curso y se dio cuenta de que su carrera profesional era más adecuada para los negocios. En 1984, a los 18 años, se graduó con un título asociado en administración de empresas.
Su plan era continuar sus estudios de negocios en Jamaica y estaba considerando aceptar una oferta de trabajo como tesorero asistente en la Conferencia de Jamaica Oriental.
Sin embargo, al recibir aliento y consejos, así como el apoyo de su familia en los Estados Unidos, Douglas se mudó a la Universidad de Loma Linda y continuó sus estudios. Fue elegible para varias becas y obtuvo su licenciatura en administración de empresas, con énfasis en contabilidad.
Al ser graduado universitario, Douglas postuló repetidamente a varias firmas de contabilidad, pero fue rechazado. Estaba desanimado y sentía que no era lo suficientemente bueno.
Al recordar los 40 años transcurridos desde que dejó West Indies College y su vida actual como tesorero de la Asociación General, le da crédito a Dios y comprende por qué ocurrieron los rechazos. Él cree que el mensaje del Señor para él es: “Todos los rechazos que has recibido han sido Mis instrucciones”.
Dios puso al joven Douglas en el camino con personas que tenían la red adecuada. Fue recomendado a Thomas Miller en la Conferencia General y posteriormente fue entrevistado. No fue contratado de inmediato debido a limitaciones presupuestarias. Pero finalmente, en julio de 1986, a Douglas le ofrecieron un trabajo como auditor asistente en la Asociación General. Aceptó el trabajo y le fue bien, aunque todavía estaba buscando “trabajos de contabilidad seculares mejores y altamente reconocidos”. También continuó estudiando y aprovechó diversas oportunidades que lo harían ascender en su profesión y le brindarían una valiosa experiencia.
Obtuvo un certificado del Programa de Liderazgo y Gestión Estratégica que se ofrece en la Universidad de Cornell. Obtuvo su Maestría en Administración de Empresas de la Universidad Estatal de California, San Bernardino. Douglas posee una licencia de Contador Público Certificado para los estados de California y Florida en EE. UU. Está reconocido como Contador Público en Jamaica y también es Contador Público de Gestión Global.
Una de las oportunidades que impulsó a Douglas a avanzar en su carrera y en su servicio a la iglesia de Dios fue su nombramiento como director ejecutivo del Servicio de Auditoría de la Conferencia General (GCAS) en 2006. Al recordar este paso, Douglas declaró a los graduados que Dios lo había colocado , como Él los colocará, donde Él quiere que estén.
“Cuando miro hacia atrás, reconozco la mano de Dios. Si hubiera hecho el ministerio, si hubiera tomado la medicina, no habría estado preparado para lo que Dios tenía reservado para mí”, dijo Douglas. “Cuando Dios te coloque, también te preparará para donde necesitas estar”.
Señalando el significado espiritual del trabajo de su vida y lo que lo motiva, Douglas dijo:
“Jesús viene, por eso necesitamos movilizar todos los recursos de nuestra iglesia (humanos, financieros, tecnológicos) ¡todo para terminar la obra del evangelio!” Enfatizó: “Jesús vendrá pronto y está buscando personas para unirse a su fuerza laboral. Ya sea en el trabajo de la iglesia, en la escuela o en cualquier lugar donde se encuentre, para ser visto y conocido como un proclamador del evangelio de Jesucristo para que Él pueda venir”.
Fuente: https://www.adventistworld.org/
