Tras el reciente estado de calamidad en el norte de Samar causado por las fuertes lluvias persistentes provenientes de una línea de corte que pasaba, la Agencia Adventista de Desarrollo y Recursos Asistenciales (ADRA) Filipinas y Servicios Comunitarios Adventistas (ACS) distribuyeron suministros muy necesarios a muchas de las víctimas de las inundaciones.
En una reciente actualización de video compartida en la página de Facebook de ADRA Filipinas, el equipo de ADRA llevó a cabo una evaluación exhaustiva para medir la magnitud del daño causado por la devastadora inundación que tuvo lugar el 21 de noviembre e identificar las necesidades más urgentes de las personas afectadas por ella. Una vez más, las organizaciones adventistas están demostrando su compromiso de brindar ayuda inmediata a las comunidades afectadas, dijeron los líderes de la iglesia regional.
En una serie de reuniones de cortesía, ADRA y ACS dialogaron con funcionarios locales clave, incluidos el gobernador Edwin Ongchuan y el vicegobernador Clarence Dato del norte de Samar, y el alcalde Francisco Rosales III de Catarman. Estas reuniones tenían como objetivo fomentar la colaboración y garantizar una respuesta sincronizada a la crisis, informaron los líderes.
Un total de 1.120 hogares en los municipios de Catarman, Mapanas y Gamay en el norte de Samar han recibido paquetes de alimentos esenciales, gracias a los esfuerzos combinados de ADRA Filipinas, ACS y la Misión Samar, en asociación con la Unión Central Filipina Conferencia de la Iglesia Adventista.
ADRA Filipinas informó que cada paquete de alimentos distribuido incluye 10 kilogramos (aproximadamente 22 libras) de arroz, 2 kilogramos (4,4 libras) de frijoles mungo, tres latas de sardinas y tres latas de atún. También incluye dos paquetes de galletas o crackers y un litro de aceite de cocina.
Los esfuerzos de colaboración de las organizaciones involucradas hicieron posible que esta ayuda crucial se entregara rápidamente, con el objetivo de disminuir las dificultades inmediatas que soportan las familias afectadas por las inundaciones, dijeron los líderes.
Resaltando el espíritu de “Bayanihan” en su máxima expresión, los voluntarios de la Iglesia Adventista del Séptimo Día de Catarman desempeñaron un papel vital en el embalaje y entrega de los productos. Su dedicación y arduo trabajo sirven como un poderoso ejemplo de una comunidad que se une frente a la adversidad, dijeron los líderes.
“Estamos agradecidos por el apoyo de ADRA Filipinas, ACS y nuestros socios locales en este momento crítico”, dijo el gobernador Ongchuan. “La generosidad y unidad mostradas por nuestros voluntarios ejemplifican la esencia de la resiliencia comunitaria”.
ADRA y ACS permanecen sobre el terreno, respondiendo a las necesidades actuales de las familias afectadas desde la inundación. Su presencia continua e iniciativas de colaboración subrayan la importancia de una respuesta rápida y coordinada para apoyar a las comunidades en el proceso de recuperación y reconstrucción, dijeron los líderes.
Fuente: https://www.adventistworld.org/
