Practicar deportes es ciertamente beneficioso para los seres humanos; y cuando esta actividad puede ayudar a otras personas, es aún mejor. El Desafío Solidario tendrá lugar en diferentes ciudades de Brasil y puede considerarse inclusivo porque contará con personas con discapacidad en la lista de participantes.
Manoel Araújo es uno de los atletas participantes. Su vida podría haber sido una historia más de un joven común y corriente del campo, pero un accidente cambió su forma de vivir. Cuando solo tenía 13 años, se fue a bañar a un estanque con unos amigos. Los momentos de ocio, sin embargo, se vieron interrumpidos cuando un coche dio marcha atrás de forma inesperada y dejó a Manoel atrapado bajo el peso del vehículo. La pierna del entonces adolescente fue aplastada y la amputación se hizo inevitable.
Los años siguientes estuvieron llenos de dolor y sufrimiento. Araújo se encontró atrapado en una espiral de adicciones y autoestima debilitada. Sin embargo, las cosas dieron otro giro en 2020, cuando la Agencia Adventista de Desarrollo y Recursos Asistenciales (ADRA) se cruzó en el camino de Araújo. Partió del Desafío Solidario, proyecto que la agencia desarrolla en Natal, Rio Grande do Norte, que promueve la salud, la calidad de vida y el incentivo a la inclusión a través de la práctica del deporte.
Mantenida por ADRA en Rio Grande do Norte, la iniciativa, que está marcada por una carrera, está en su quinta edición.
El evento presencial se realiza a las 06:00 horas del día 30 de abril de 2023, en el Parque Municipal de Natal, área de recarga de aguas subterráneas de la capital del estado y uno de los principales paisajes de dunas de la misma.
Según el organizador de la carrera, Erinaldo Costa, la intención es fomentar buenos hábitos de salud a través de la práctica deportiva. “Es muy importante practicar deporte. Al fin y al cabo, se trata del cuidado de la salud, uno de los factores esenciales para una vida mejor”, dice.
En el camino, los participantes se enfrentarán a barreras que hacen que el desafío sea aún mayor. Una de ellas es correr un tramo por camino de tierra, además de cruzar tramos señalizados por escaleras.
Inclusión
En Natal, el desafío incluirá a las personas con discapacidad (PCD). “Tendremos un pelotón de ellos, que saldrán cinco minutos antes que el resto de atletas. También proporcionaremos guías para personas con discapacidad visual durante todo el recorrido”, explica Costa.
Además del Reto Solidario, durante todo el año, a través del proyecto ADRA Runners, se anima al grupo de corredores a practicar deporte. Las actividades se desarrollan en grupo, con la práctica regular de carrera, caminata y entrenamiento funcional y psicomotor. Estas actividades están asociadas a refrigerios saludables, intercambio de experiencias sociales y personales, orientación técnica de profesionales de educación física, nutrición y fisioterapia y, en algunos casos, orientación psicológica en la oficina de la organización para este fin.
“Buscamos desarrollar a nuestros participantes para que sigan practicando actividad física para tener una mejor calidad de vida”, dice Costa.
superación
Gracias al proyecto, Araújo tuvo un cambio de vida y otra visión de su historia. “Empecé a tener otras perspectivas. Antes iba de bar en bar bebiendo. Ahora, desde hace dos años, no bebo y estoy enfocado en los proyectos de salud que ofrece ADRA”, enfatiza.
Araújo también reafirma que en el proyecto conoció a personas que ahora son parte de su vida. “Después de perder una pierna, tener la oportunidad de correr es indescriptible. La inclusión en las carreras es fundamental. Mi autoestima estaba baja, hoy es alta. Entreno mucho para participar en la carrera. hoy soy una persona nueva”, concluye.
Fuente: https://adventist.news/
