“Hola hermanas y hermanos”
Hoy quiero iniciar invitándoles a abrir sus biblias en 2 Timoteo 3:16-17 donde leemos: «Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia, a fin de que el hombre de Dios sea perfecto, enteramente preparado para toda buena obra.»
¡Qué declaración de estos dos versículos! La Biblia es una fuente inagotable de sabiduría, consuelo y dirección. Este mes de septiembre se enfatiza en la importancia de leer la Palabra de Dios, pero la invitación no es sólo para estos días o semanas, sino para que de forma permanente podamos experimentar una renovación espiritual de forma personal y también familiar.
Precisamente al concluir hoy la Semana de Oración Familiar, aprovechemos el momento para fortalecer nuestros lazos familiares y como comunidad de fe, y eso lo logramos enfocando nuestras mentes y corazones en Cristo Jesús. A través de la oración y el estudio de Su Palabra, podemos construir hogares donde reine la paz, la unidad y el amor de Cristo.
En Deuteronomio 6:6-7, se nos instruye: «Y estas palabras que yo te mando hoy, estarán sobre tu corazón; y las repetirás a tus hijos, y hablarás de ellas estando en tu casa, y andando por el camino, y al acostarte, y cuando te levantes..»
Que Dios nos bendiga abundantemente al seguir este consejo.
¡Maranata!
Fuente: https://interamerica.org/es/
