En nuestro núcleo

Comentarios 2023.01.29

Cuando mis hijos expresaron interés en el bautismo, una de las cosas que mi esposo y yo enfatizamos fue que tomar “estudios” con un pastor no se trataba solo de conocer mejor a Jesús. Especialmente a medida que el tiempo avanza hacia lo inevitable y nuestras creencias se vuelven cada vez más cuestionadas, todos los adventistas necesitan saber los “qué” y los “por qué”. Este “manual” sobre las 28 Creencias Fundamentales de la Iglesia Adventista del Séptimo Día está diseñado para ayudar a los creyentes antiguos y nuevos por igual a tener una forma más concisa e incluso conversacional de recordar nuestras doctrinas fundamentales. Esperamos que lo encuentre útil.

—Wilona Karimabadi

1. Las Sagradas Escrituras

Base Bíblica: Salmo 119:105; Proverbios 30:5, 6; Isaías 8:20; Juan 17:17; 1 Tesalonicenses 2:13; 2 Timoteo 3:16, 17; Hebreos 4:12; 2 Pedro 1:20, 21.

Creemos que la Biblia es el verdadero negocio: palabras de Dios a través de Su influencia en las mentes y los corazones de aquellos que se dedicaron a Él. A través de la Biblia, Dios nos guía, inspira, enseña y regula. Es la guía más sólida para la vida y podemos confiar plenamente en ella.

2. La Trinidad

Base bíblica: Génesis 1:26; Deuteronomio 6:4; Isaías 6:8; Mateo 28:19; Juan 3:16; 2 Corintios 1:21, 22; 13:14; Efesios 4:4-6; 1 Pedro 1:2.

Hay un Dios, y sin embargo, Él es Padre, Hijo (Jesús) y Espíritu Santo. Él siempre está con nosotros, nunca va a ninguna parte; El sabe todo; y nuestras mentes humanas nunca podrán entender cuán maravilloso es Él. Sobre todo, Él es la personificación del amor.

3. El Padre

Base Bíblica: Génesis 1:1; Deuteronomio 4:35; Salmo 110:1, 4; Juan 3:16; 14:9; 1 Corintios 15:28; 1 Timoteo 1:17; 1 Juan 4:8; Apocalipsis 4:11.

Dios es más maravilloso de lo que la mayoría puede imaginar. Las caricaturas de Dios como un ser mezquino, severo e implacable no son ciertas. Dios es puro amor, consuelo, sabiduría, compasión, alegría y mucho más.

4. El Hijo

Base Bíblica: Isaías 53:4-6; Daniel 9:25-27; Lucas 1:35; Juan 1:1-3, 14; 5:22; 10:30; 14:1-3, 9, 13; Romanos 6:23; 1 Corintios 15:3, 4; 2 Corintios 3:18; 5:17-19; Filipenses 2:5-11; Colosenses 1:15-19; Hebreos 2:9-18; 8:1, 2.

Jesús es milagroso en todos los sentidos de la palabra. Creemos que Dios vino a la tierra a través de Jesucristo, quien vivió como ser humano; por lo tanto, no hay nada que la humanidad haya experimentado que Él no entienda. Gracias a Él, esta vida no es todo lo que hay. Y gracias a Él, el Señor que nos salvó, nos redimió y nos apoya, podemos estar en el cielo, porque Él limpió todos nuestros desastres.

5. El Espíritu Santo

Base Bíblica: Génesis 1:1, 2; 2 Samuel 23:2; Salmo 51:11; Isaías 61:1; Lucas 1:35; 4:18; Juan 14:16-18, 26; 15-26; 16:7-13; Hechos 1:8; 5:3; 10:38; Romanos 5:5; 1 Corintios 12:7-11; 2 Corintios 3:18; 2 Pedro 1:21.

El Espíritu Santo es el “comunicador” y el “conquistador”, lo que significa que nosotros, como humanos, no podemos entender cómo hace lo que hace, pero lo hace. Esa convicción de hacer algo que nunca imaginaste que podrías, es Él. ¿Ese inexplicable consuelo y paz en la peor situación? Es él. ¿La voz que te dice qué camino tomar cuando no sabes el camino? Ese es el. Es misterioso y sin embargo no lo es, porque para el creyente lo inexplicable a menudo tiene el Espíritu Santo escrito por todas partes.

6. Creación

Base Bíblica: Génesis 1-2; 5; 11; Éxodo 20:8-11; Salmo 19:1-6; 33:6, 9; 104; Isaías 45:12, 18; Hechos 17-24; Colosenses 1:16; Hebreos 1:2; 11:3; Apocalipsis 10:6; 14:7.

Creemos que en seis días literales Dios creó este vasto universo en el que vivimos. El séptimo día descansó. No es que tenga las mismas limitaciones de energía que los humanos, pero al hacerlo, apartó el séptimo día como nuestro día de descanso y recuerdo, y es algo maravilloso. En Su creación de los seres humanos, Él hizo algo especial e intrínsecamente y para siempre vinculado a Él. Cada ser vivo en este mundo cuenta la historia de cuán maravilloso es nuestro Dios.

7. La naturaleza de la humanidad

Base Bíblica: Génesis 1:26-28; 2:7, 15; 3; Salmo 8:4-8; 51:5, 10; 58:3; Jeremías 17:9; Hechos 17:24-28; Romanos 5:12-17; 2 Corintios 5:19, 20; Efesios 2:3; 1 Tesalonicenses 5:23; 1 Juan 3:4; 4:7, 8, 11, 20.

Cuando Dios hizo a los seres humanos, eran perfección. Todo sobre nosotros estaba conectado a Él como personas únicas con el poder de elegir. Lamentablemente, la caída de Adán y Eva nos dejó como nos conocemos hoy: personas defectuosas y heridas que morirán algún día. Pero a través de Cristo y lo que Él hizo por nosotros, tenemos una segunda oportunidad de lo que Dios siempre quiso para nosotros. Todo lo que se nos pide es amarlo a Él y amarnos unos a otros y cuidar este gran mundo que Él hizo.

8. El conflicto de los siglos

Base bíblica: Génesis 3; 6-8; Trabajo 1:6-12; Isaías 14:12-14; Ezequiel 28:12-18; Romanos 1:19-32; 3:4; 5:12-21; 8:19-22; 1 Corintios 4:9; Hebreos 1:14; 1 Pedro 5:8; 2 Pedro 3:6; Apocalipsis 12:4-9.

Un cuento tan antiguo como el tiempo: el del bien contra el mal. Satanás, una vez parte del cielo, se convirtió en enemigo de Dios, lo que llevó a una buena parte de los ángeles a la rebelión. Desde entonces existe el mal. Es por eso que hay tanta enfermedad de mente, cuerpo, carácter y corazón en este mundo. Pero no todo está perdido. El amor de Dios ya venció, y mientras la humanidad soporta los embates del mal, Jesús no nos deja indefensos. Él viene cada vez que lo invocamos, y permanecerá así hasta que estemos con Él al final.

9. La vida, muerte y resurrección de Cristo

Base bíblica: Génesis 3:15; Salmo 22:1; Isaías 53; Juan 3:16; 14:30; Romanos 1:4; 3:25; 4:25; 8:3, 4; 1 Corintios 15:3, 4, 20-22; 2 Corintios 5:14, 15, 19-21; Filipenses 2:6-11; Colosenses 2:15; 1 Pedro 2:21, 22; 1 Juan 2:2; 4:10.

Creemos que Cristo vino a la tierra a morir por nuestros pecados, y Su resurrección puso fin a todo el mal con el que este mundo podría aplastarnos. Eso no quiere decir que no pasemos por el dolor, la violencia y la enfermedad en nuestra vida terrenal. Pero a través de Cristo y lo que Él hizo por nosotros, se nos ha dado la victoria total sobre cualquier cosa que Satanás tenga para lanzarnos. Este es el poder supremo, y es nuestro para reclamarlo, todo por el amor de Jesucristo. Solo tenemos que aceptarlo.

10. La experiencia de la salvación

Base bíblica: Génesis 3:15; Isaías 45:22; 53; Jeremías 31:31-34; Ezequiel 33:11; 36:25-27; Habacuc 2:4; Marcos 9:23, 24; Juan 3:3-8, 16; 16:8; Romanos 3:21-26; 5:6-10; 8:1-4, 14-17; 10:17; 12:2; 2 Corintios 5:17-21; Gálatas 1:4; 3:13, 14, 26; 4:4-7; Efesios 2:4-10; Colosenses 1:13, 14; Tito 3:7; Hebreos 8:7-12; 1 Pedro 1:23; 2:21, 22; 2 Pedro 1:3, 4; Apocalipsis 13:8.

La salvación es tan real como la nariz en tu cara. Caes a causa del pecado, pero a través de la salvación de Cristo, eres levantado. Esa es toda la misión de Cristo para nosotros. Esta fe en la gracia y la misericordia de Dios es lo que nos ayudará, y es mucho más que un pensamiento agradable. La salvación por causa de Jesús es poderosa.

11. Crecer en Cristo

Base Bíblica: 1 Crónicas 29:11; Salmo 1:1, 2; 23:4; 77:11, 12; Mateo 20:25-28; 25:31-46; Lucas 10:17-20; Juan 20:21; Romanos 8:38, 39; 2 Corintios 3:17, 18; Gálatas 5:22-25; Efesios 5:19, 20; 6:12-18; Filipenses 3:7-14; Colosenses 1:13, 14; 2:6, 14, 15; 1 Tesalonicenses 5:16-18, 23; Hebreos 10:25; Santiago 1:27; 2 Pedro 2:9; 3:18; 1 Juan 4:4.

La vida no está destinada a quedarse estancada. Aunque vivimos en un mundo pecaminoso y es probable que cometamos nuestra parte de “infracciones”, Jesús camina con nosotros para que sigamos creciendo y avanzando. Él es nuestro ejemplo a seguir para tomar las mejores decisiones de vida que no solo honren a Dios, sino que beneficien nuestras vidas en esta tierra. No tenemos que quedarnos atascados, Jesús siempre nos ofrece un camino de crecimiento que al final nos prepara para la vida eterna con Él.

12. La Iglesia

Base Bíblica: Génesis 12:1-3; Éxodo 19:3-7; Mateo 16:13-20; 18:18; 28:19, 20; Hechos 2:38-42; 7:38; 1 Corintios 1:2; Efesios 1:22, 23; 2:19-22; 3:8-11; 5:23-27; Colosenses 1:17, 18; 1 Pedro 2:9.

La iglesia no es un edificio, y no es un lugar semanal para encontrar gente un sábado por la mañana. La iglesia es el grupo colectivo de todos aquellos que creen que Jesús es el Salvador. La iglesia no mira a nadie más que a Jesús, ya que Él es la máxima autoridad en todo y, afortunadamente, solo está a una oración de distancia. El amor que Jesús tiene por la iglesia es insondable, sí, es así de profundo.

13. El remanente y su misión

Base Bíblica: Daniel 7:9-14; Isaías 1:9; 11:11; Jeremías 23:3; Miqueas 2:12; 2 Corintios 5:10; 1 Pedro 1:16-19; 4:17; 2 Pedro 3:10-14; Judas 3, 14; Apocalipsis 12:17; 14:6-12; 18:1-4.

Mucha gente hoy se pregunta si nuestro mundo está a punto de explotar, si esta vida tal como la conocemos está a punto de cambiar para siempre. Nuestra misión especial es ayudar al mundo a entender que esta vida no es todo lo que hay, algo en lo que el libro de Apocalipsis profundiza. Por lo tanto, a medida que el mundo se sale cada vez más de control, el camino a seguir es tomar los mandamientos en serio y aferrarnos a Jesús con todo lo que tenemos. Alinearnos con Jesús es la respuesta.

14. Unidad en el Cuerpo de Cristo

Base Bíblica: Salmo 133:1; Mateo 28:19, 20; Juan 17:20-23; Hechos 17:26, 27; Romanos 12:4, 5; 1 Corintios 12:12-14; 2 Corintios 5:16, 17; Gálatas 3:27-29; Efesios 2:13-16; 4:3-6, 11-16; Colosenses 3:10-15.

En Cristo todos pertenecemos juntos sin importar cómo nos veamos, qué idiomas hablemos, cómo pensemos y lo que nos haga funcionar. Y está bien tener diferencias, recordando que somos parte de una familia encabezada por el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo, y somos elegidos. Lo más importante, somos amados y valorados por lo que somos, tal como somos. Por lo tanto, debemos impartir este amor a todos los que nos rodean.

15. Bautismo

Base Bíblica: Mateo 28:19, 20; Hechos 2:38; 16:30-33; 22:16; Romanos 6:1-6; Gálatas 3:27; Colosenses 2:12, 13.

Mientras que uno ciertamente puede convertirse en un seguidor de Cristo en su corazón, el bautismo es un símbolo público que denota un profundo compromiso con una nueva vida con Jesús. El simbolismo de lavar y enterrar todo lo que te sujetaba antes y surgir de esa agua fresca y renovada en Cristo es muy poderoso.

16. La Cena del Señor

Base Bíblica: Mateo 26:17-30; Juan 6:48-63; 13:1-17; 1 Corintios 10:16, 17; 11:23-30; Apocalipsis 3:20.

En este elemento particular de la práctica espiritual, el poder del recuerdo es especialmente apreciado. A través de este acto, pensamos en Cristo rebajándose para limpiar los pies de personas que tenían muchas faltas (como nosotros), amándolas y cuidándolas a pesar de todo. Al consumir el pan y el jugo, pensamos en esa preciosa última comida que compartió antes de seguir adelante para hacer lo más valiente que jamás se haya hecho. Hacer un balance de estas bendiciones al participar en estas ordenanzas es bueno para el alma.

17. Dones espirituales y ministerios

Base Bíblica: Hechos 6:1-7; Romanos 12:4-8; 1 Corintios 12:7-11, 27, 28; Efesios 4:8, 11-16; 1 Timoteo 3:1-13; 1 Pedro 4:10, 11.

Es fácil pensar que nosotros, como seres humanos, estamos aquí en este planeta en posesión de algunos talentos básicos con los que debemos vivir nuestras vidas. Pero Dios nos valora mucho más que eso y le ha dado a cada persona dones únicos para servir con amor a toda la humanidad. Los dones como la capacidad de enseñar, ser empático y compasivo, predicar, sanar, etc., son todos de un Creador amoroso que equipa a todos los que Él llama.

18. El don de profecía

Base Bíblica: Números 12:6; 2 Crónicas 20:20; Amós 3:7; Joel 2:28, 29; Hechos 2:14-21; 2 Timoteo 3:16, 17; Hebreos 1:1-3; Apocalipsis 12:17; 19:10; 22:8, 9.

No debe confundirse con la adivinación, la profecía se ha presentado inherentemente a través de las Escrituras y, en tiempos más modernos, a través del ministerio de una mujer llamada Elena de White. A través de las visiones que le fueron dadas desde su juventud, ha sido fundamental en la formación y guía de las creencias y el estudio de los adventistas del séptimo día. Su trabajo proporciona otro recurso para comprender lo que está por venir mientras esperamos el regreso de Cristo. Dicho esto, la Biblia, como la Palabra definitiva de Dios, siempre será el estándar número uno por el cual se evalúa todo.

19. La Ley de Dios

Base Bíblica: Éxodo 20:1-17; Deuteronomio 28:1-14; Salmo 19:7-14; 40:7, 8; Mateo 5:17-20; 22:36-40; Juan 14:15; 15:7-10; Romanos 8:3, 4; Efesios 2:8-10; Hebreos 8:8-10; 1 Juan 2:3; 5:3; Apocalipsis 12:17; 14:12.

Creemos que cada uno de los Diez Mandamientos debe tomarse en serio, y cuando lo hacemos, nuestras vidas naturalmente mejoran. Al obedecer estos importantes preceptos, crecemos a través del ejemplo de Cristo y nos convertimos en testigos vivos para el mundo. Pero nunca debemos olvidar que nuestra salvación viene por la gracia de Cristo, porque ciertamente no alcanzamos la perfecta adherencia a la ley.

20. El Sábado

Base Bíblica: Génesis 2:1-3; Éxodo 20:8-11; 31:1317; Levítico 23:32; Deuteronomio 5:12-15; Isaías 56:5, 6; 58:13, 14; Ezequiel 20:12, 20; Mateo 12:1-12; Marcos 1:32; Lucas 4:16; Hebreos 4:1-11.

Vemos el sábado como un regalo. No solo es un día de descanso muy necesario de nuestras vidas ocupadas; renueva nuestro espíritu y nuestra fe a través de la adoración y el tiempo que pasamos con aquellos a quienes amamos. Es un período especial de 24 horas que muestra al mundo nuestro compromiso de seguir los mandamientos y permanecer fieles a Jesús, quien es el Señor del sábado. Nos renueva, nos fortalece y fortalece nuestro vínculo con el Creador.

21. Mayordomía

Base Bíblica: Génesis 1:26-28; 2:15; 1 Crónicas 29:14; Hageo 1:3-11; Malaquías 3:8-12; Mateo 23:23; Romanos 15:26, 27; 1 Corintios 9:9-14; 2 Corintios 8:1-15; 9:7.

El Señor nos ha dado muchas bendiciones en forma de habilidades, posesiones materiales, nuestro ser físico y nuestras relaciones, y esta hermosa tierra en la que vivimos. Debido al gran amor y la generosidad del Señor, creemos que es importante cuidar todo lo que Él nos ha dado y devolverlo a través del diezmo y bendiciendo a otros en cualquier forma que podamos.

22. Comportamiento cristiano

Scriptural Basis: Genesis 7:2; Exodus 20:15; Leviticus 11:1-47; Psalm 106:3; Romans 12:1, 2; 1 Corinthians 6:19, 20; 10:31; 2 Corinthians 6:14–7:1; 10:5; Ephesians 5:1-21; Philippians 2:4; 4:8; 1 Timothy 2:9, 10; Titus 2:11, 12; 1 Peter 3:1-4; 1 John 2:6; 3 John 2.

Uno de los ideales más altos que podemos aspirar en esta vida es ser como Jesús. Él es nuestro ejemplo en todo. Entonces, en nuestro deseo de seguir Su ejemplo, los hábitos y comportamientos saludables son clave. Por lo tanto, dado que Jesús nunca fue una persona que bebía, fumaba o abusaba de las drogas, comía alimentos inmundos y dañaba su cuerpo y espíritu, nosotros tampoco deberíamos hacerlo. No tenemos nada que perder al evitar esas cosas, pero, como sabemos, mucho que perder cuando nos entregamos a ellas.

23. El matrimonio y la familia

Base Bíblica: Génesis 2:18-25; Éxodo 20:12; Deuteronomio 6:5-9; Proverbios 22:6; Malaquías 4:5, 6; Mateo 5:31, 32; 19:3-9, 12; Marcos 10:11, 12; Juan 2:1-11; 1 Corintios 7:7, 10, 11; 2 Corintios 6:14; Efesios 5:21-33; 6:1-4.

Creemos en el matrimonio entre un hombre y una mujer unidos en la misma fe para toda la vida. El matrimonio puede ser difícil y las tasas de divorcio son altas; por lo tanto, esta unión es algo para tomar muy en serio. El Señor conoce los efectos del pecado en nuestras relaciones, pero siempre está ahí para ayudarnos. La familia es una unidad muy importante, un don que figura en el avance del evangelio, por lo que buscamos criar a nuestros hijos en la fe a través del ejemplo y la exposición a la naturaleza amorosa de Jesús. Todos los miembros de la familia de Dios, sin importar si están casados ​​o solteros, son individuos muy apreciados y valiosos.

24. El Ministerio de Cristo en el Santuario Celestial

Base bíblica: Levítico 16; Números 14:34; Ezequiel 4:6; Daniel 7:9-27; 8:13, 14; 9:24-27; Hebreos 1:3; 2:16, 17; 4:14-16; 8:1-5; 9:11-28; 10:19-22; Apocalipsis 8:3-5; 11:19; 14:6, 7, 12; 20:12; 22:11, 12.

Cristo obra en el santuario celestial como lo haría el sumo sacerdote en el santuario del Antiguo Testamento. A través de esta obra Él se está asegurando de que aquellos que lo aman y guardan los mandamientos estarán con Él en el cielo. Si bien la palabra “juicio” suena negativa, en este caso se trata de acercar a los amados de Cristo, un trabajo de amor, por así decirlo.

25. La segunda venida de Cristo

Base bíblica: Mateo 24; Marcos 13; Lucas 21; Juan 14:1-3; Hechos 1:9-11; 1 Corintios 15:51-54; 1 Tesalonicenses 4:13-18; 5:1-6; 2 Tesalonicenses 1:7-10; 2:8; 2 Timoteo 3:1-5; Tito 2:13; Hebreos 9:28; Apocalipsis 1:7; 14:14-20; 19:11-21.

La vida en la tierra es temporal, y todo el dolor, el sufrimiento y la tristeza finalmente terminarán con la segunda venida de Jesús. No será un incidente silencioso, ya que todos los seres vivos lo verán, lo escucharán y lo sentirán. Todos los que han amado y vivido para Cristo y muerto en el conocimiento de su regreso serán resucitados. Las familias rotas se reunirán y las que hemos perdido volverán a estar con nosotros. Todo lo que la profecía ha señalado con respecto a este momento se cumplirá. Pero debido a que solo el Padre conoce el tiempo, se nos dice que vivamos preparados.

26. Muerte y Resurrección

Base Bíblica: Job 19:25-27; Salmo 146:3, 4; Eclesiastés 9:5, 6, 10; Daniel 12:2, 13; Isaías 25:8; Juan 5:28, 29; 11:11-14; Romanos 6:23; 1 Corintios 15:51-54; Colosenses 3:4; 1 Tesalonicenses 4:13-17; 1 Timoteo 6:15, 16; Apocalipsis 20:1-10.

Esta es una creencia que está llena de mucha esperanza. La muerte no es el final de la historia para aquellos que reclaman a Jesús como su Salvador. Es presionar el botón de pausa en una vida. Luego, cuando Cristo regresa por nosotros, se presiona el botón de reproducción y una nueva vida en Cristo avanza, mejor que nunca para vivir en gozo en el cielo con Él.

27. El Milenio y el Fin del Pecado

Base Bíblica: Jeremías 4:23-26; Ezequiel 28:18, 19; Malaquías 4:1; 1 Corintios 6:2, 3; Apocalipsis 20; 21:1-5.

Si bien esto puede sonar como la trama de un gran éxito de taquilla de ciencia ficción de Hollywood, no hay actores ni gurús de los efectos especiales involucrados. Aquí, los salvos en Jesús estarán a salvo en el cielo con Él, mientras que Satanás y sus ángeles, que ya no podrán tocarnos, se volverán locos en una tierra horrible. Pero al final de los 1000 años descenderemos con Cristo, donde el fuego de Dios consumirá el mal y limpiará la tierra para siempre. ¿Pecado y pecadores? Una cosa del pasado.

28. La Nueva Tierra

Base bíblica: Isaías 35; 65:17-25; Mateo 5:5; 2 Pedro 3:13; Apocalipsis 11:15; 21:1-7; 22:1-5.

Eso es todo. Lo mejor de lo mejor, la paz y la alegría que hemos anhelado, con este mundo perfecto para disfrutar, es todo lo que conoceremos por la eternidad. La tierra reluciente y nueva será el lugar perfecto para que el pueblo de Dios viva completamente libre de sufrimiento, muerte y dolor. Ya no hay batalla entre el bien y el mal, porque el Señor ha prevalecido, para nunca más ser desafiado. Y todo, hasta la última cosa, contará la historia de que Dios es, y siempre ha sido, amor.

Consulte este enlace para ver la redacción oficial de cada creencia fundamental:

http://www.adventist.org/beliefs/


Fuente: https://www.adventistworld.org/