Hola hermanas y hermanos de Interamérica, ¡Feliz Sábado!
Hoy celebramos y honramos el importante papel que desempeñan los laicos Adventistas del Séptimo Día. Su dedicación, compromiso y amor por la obra de Dios, son fundamentales para llevar adelante la misión de compartir el mensaje de esperanza y salvación y al mismo tiempo son un ejemplo inspirador de cómo vivir la fe en la vida cotidiana.
Queridos laicos, su labor en la iglesia y en la sociedad refleja el amor de Cristo y su deseo de marcar la diferencia en el mundo que nos rodea. Ustedes son embajadores de la verdad y de la compasión, y su influencia positiva se extiende a todos los rincones de nuestras comunidades.
Hoy queremos agradecerles por su dedicación inquebrantable, su espíritu de servicio abnegado y su contribución invaluable a la expansión del Reino de Dios. Cada uno de ustedes es una pieza fundamental en el rompecabezas de nuestra comunidad de fe, y su labor no pasa desapercibida.
Aprovecho para animarlos a seguir adelante con fervor y determinación en su labor, y como dice Colosenses 3:23-24:
«Y todo lo que hagáis, hacedlo de corazón, como para el Señor y no para los hombres; sabiendo que del Señor recibiréis la recompensa de la herencia, porque a Cristo el Señor servís.»
Que su luz siga brillando, inspirando a otros a unirse a esta hermosa misión de amor y esperanza. Juntos podemos continuar sirviendo, educando y compartiendo el amor de Dios, que transforma corazones.
¡Maranata!
Mensaje dirigido a la Iglesia Adventista del Séptimo Día en Interamérica por el presidente de la División Interamericana, Elie Henry–Personal de noticias de la DIA
Fuente: https://interamerica.org/es/
