Compasión sin límites

Noticias Adventistas 2022.03.09

En los primeros 12 días de la guerra en Ucrania, más de 1,2 millones de refugiados cruzaron la frontera polaca para escapar de la agresión rusa. El pueblo de Polonia, sin dudarlo, ha abierto no solo sus corazones sino también sus hogares a los refugiados que cruzan a su país.

La Iglesia Adventista del Séptimo Día en Polonia también ofreció su ayuda. La comunidad adventista de unos 6.000 ha preparado más de 1.200 refugios en propiedades de la iglesia y en casas particulares. Hasta el 4 de marzo, casi 400 personas se han beneficiado de su asistencia, informaron los líderes.

Las organizaciones adventistas de socorro también están involucradas. Voluntarios de la Agencia Adventista de Desarrollo y Recursos Asistenciales (ADRA) en Polonia visitaron varios cruces fronterizos y de recepción, donde entregaron paquetes y organizaron alojamiento mientras aprendían sobre las necesidades más urgentes de las personas que huyen de la guerra. ADRA ha estado preparando y distribuyendo “Paquetes de inicio”, un conjunto de artículos básicos de higiene personal para las personas que cruzan la frontera. También participa en el transporte humanitario a Ucrania.

El Servicio de Caridad Cristiana “Blisko Serca” (Cerca del Corazón) ha destinado dos de sus centros para recibir refugiados de Ucrania. En conjunto, el centro Orion en Wisła y el centro Polubie en Zatonie están preparados para albergar a más de 70 personas.

El Colegio Superior de Teología y Humanidades de Polonia en Podkowa Leśna ya ha recibido a más de 30 personas. Hay planes en marcha para poner a disposición edificios y locales adicionales, aumentando el número de personas que pueden albergarse. Un jardín de infantes para niños refugiados, operado por voluntarios de la iglesia local, también abrirá en el campus en los próximos días.

Los miembros más jóvenes de la iglesia también participan en el esfuerzo de socorro. La Asociación Adventista de Escultismo (ZHA) y los Conquistadores organizaron colectas de caridad en toda Polonia. La respuesta fue enorme. Sacos de dormir, colchonetas, frazadas, almohadas, edredones, productos de higiene, alimentos no perecederos, linternas, baterías, pañales, medicinas, ayudas médicas y estufas ya están en camino. Las donaciones se enviaron a la parte occidental de Ucrania, en consonancia con la migración de personas provenientes de la parte oriental del país.

Ryszard Jankowski, presidente de la Unión Conferencia Polaca de la Iglesia Adventista, junto con Tomasz Żelazko, otro ministro, visitaron uno de los cruces fronterizos y, en su camino de regreso a Varsovia, los hombres ofrecieron un paseo en su vehículo a un grupo de refugiados.

“Es imposible describir la escala de actividades que lleva a cabo no solo la Iglesia Adventista a través de sus instituciones, sino sobre todo los miembros individuales de la comunidad y las iglesias locales”, dijeron los líderes de la iglesia. “Muchas iglesias locales han hecho una pausa en la organización de servicios sabáticos mientras sus locales actualmente sirven como alojamiento. Mucha gente está sacrificando no solo sus finanzas sino, sobre todo, abriendo sus propios hogares y dando la bienvenida a los necesitados”.

Por: Daniel Kluska, Unión Asociación Polaca y Adventist Review


Fuente: https://www.adventistworld.org/