Nunca es demasiado pronto para que los padres ayuden a sus hijos a priorizar la salud del corazón y mantener sus corazones en la mejor forma posible.
Según la Asociación Estadounidense del Corazón , alentar a los niños a hacer cosas pequeñas todos los días que mantengan sus corazones saludables puede aumentar su salud general y su esperanza de vida, al mismo tiempo que disminuye el riesgo de desarrollar otras enfermedades, como el cáncer y la diabetes tipo 2.
Erik Frandsen , MD, cardiólogo pediátrico del Hospital de Niños de la Universidad de Loma Linda, analiza algunas formas sencillas de ayudar a la salud del corazón de su hijo. Él dice que una regla mnemotécnica fácil de recordar es la “Regla 5-2-1-0”.
5 PORCIONES DE FRUTAS Y VERDURAS
Trate de asegurarse de que su hijo coma al menos cinco porciones de frutas y verduras todos los días, dice Frandsen. Recomienda buscar un arcoíris de productos mientras compra comestibles, como elegir brócoli verde o judías verdes, pimientos amarillos, manzanas rojas, etc.
2 HORAS DE TIEMPO DE PANTALLA O MENOS
Limite la cantidad de tiempo de pantalla que su hijo consume todos los días a dos horas o menos, dice Frandsen. “Sabemos por investigaciones que cuanto más tiempo de pantalla pasa un niño, mayor es su índice de masa corporal o IMC”, dice. “El IMC es cómo tu peso corresponde a tu altura. Un IMC más alto puede indicar mayores riesgos de sobrepeso u obesidad”.
Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades , un niño obeso puede tener riesgos de salud más inmediatos, incluidos factores de riesgo de enfermedades cardiovasculares, problemas respiratorios como asma y apnea del sueño, problemas en las articulaciones, enfermedad del hígado graso y más.
1 HORA DE ACTIVIDAD FÍSICA
Los niños necesitan al menos una hora de actividad física al día, dice Frandsen. “Esto puede ser jugar en el patio de recreo. Puede ser en el recreo. Puede ser pasear a su perro”, cualquier actividad en la que su hijo sea físicamente activo.
0 BEBIDAS AZUCARADAS
Frandsen recomienda que los niños eviten las bebidas azucaradas todos los días. “Esta puede ser una manera fácil de eliminar el exceso de calorías que no son nutritivas”, dice.
Algunas bebidas que contienen altas cantidades de azúcar agregada incluyen refrescos, bebidas de frutas, ponches de frutas, leches y cafés saborizados y bebidas deportivas.
Frandsen dice que sabe que puede ser un desafío cambiar inmediatamente las cosas en la vida de su hijo. Para facilitar la transición a hábitos más saludables para el corazón, recomienda elegir una práctica cada mes durante varios meses y concentrarse en eso.
Que sea un esfuerzo familiar, dice Frandsen. “Sé que no es fácil para mí ni para mis pacientes hacer estos cambios por sí mismos; es más fácil si toda la familia está involucrada. Estos son buenos para su salud sin importar su edad. Lo que hace toda la familia, es más probable que los niños lo sigan”.
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Este artículo fue publicado originalmente en el sitio de noticias de Salud de la Universidad de Loma Linda.
Fuente: https://adventist.news/
