El fenómeno meteorológico que afecta por estos días a Cuba ha causado numerosos perjuicios en las regiones central y oriental del país. Las intensas lluvias han provocado inundaciones, desbordamientos de ríos y afectaciones en viviendas, así como la incomunicación entre territorios.
La ciudad de Camagüey, en particular, presenta una situación alarmante. Las inundaciones en zonas bajas han perjudicado un gran número de familias, entre ellos, miembros de la Iglesia Adventista del Séptimo Día, quienes han sufrido la penetración del agua en sus hogares, llegando al nivel de la cintura. El Reparto Garrido, donde está enclavado el principal templo de culto, es de las zonas más afectadas; el desbordamiento ha superado los límites de las aceras y llegado hasta los escalones de la casa de Dios.
Pastores y líderes que trabajan en las oficinas de la Asociación Central de los Adventistas del Séptimo Día, radicada en el sitio, se unieron para socorrer a los hermanos afectados. El Pr. Gendris Pérez, Secretario de la Asociación, cuenta que junto a él estuvo el custodio, el cocinero, el primer anciano de la iglesia de Garrido, así como algunos hermanos más, y con el Presidente, Luis Ernesto Rodríguez, marchó otro equipo.
Las labores realizadas fueron la evacuación de miembros de iglesia hacia otras casas no afectadas por la inundación, haciendo provisión de alimentos y hospedaje para ellos hasta que desciendan las aguas. Se dispuso un transporte para el traslado de una anciana procurando así el cuidado de los feligreses, en uso de la hermandad que produce la fe en Cristo Jesús.
En relación con los objetos materiales Sara Hechavarría, Departamental de Arte y Cultura, notificó que “en algunos casos las pertenencias se movieron a otras casas más seguras; en otros, donde existe un cuarto arriba, han ayudado a subir las pertenencias.” Declara que esto es posible porque Dios toca los corazones para ayudar y socorrer.
Por último, Gendris agrega que el templo de Garrido está dispuesto para que los vecinos de la zona puedan quedarse allí y así servir como albergue para los necesitados. Agregó que “en cuanto a los municipios Vertientes y Florida, han sido bastante afectados por las lluvias, además de otros lugares poblacionales aledaños a la ciudad de Camagüey.” Compartió además las noticias del Pastor Alexei de la iglesia de Santa Marta, municipio Santa Cruz del Sur, donde jóvenes y miembros también se unieron para ayudar en los hogares perjudicados, en espera de que continúe subiendo el nivel de las aguas.
En medio de la compleja situación, a estos hermanos los sostiene la paz y el amor de Dios, testificando al mundo sobre un pueblo que espera confiadamente a su Rey y en adversidades como esta, solo reconoce las claras señales de su pronta venida.
Por: MSc. Dianelys Hernández Oliva.
Extraído de: https://www.radio3ibncuba.com
