“El amor, base de la creación y de la redención, es el fundamento de la verdadera educación” ( White, La Educación p. 15 ).
Basados en este amor originado en Dios, 13 alumnos del sexto semestre de la licenciatura en educación de la Universidad Linda Vista, ubicada en Chiapas México, decidieron emprender bajo el liderazgo de uno de los docentes que describe la experiencia, el proyecto denominado “conexión-acción”.
Todo inició cuando la Vicerrectoría Académica desafió a los docentes a emprender algún proyecto educativo que pudiera desarrollar en los estudiantes las competencias señaladas por determinada asignatura o un grupo de asignaturas, aunado al aprendizaje académico y para la vida, mediante el servicio a los necesitados.
Después de observar las necesidades de aprendizaje de una comunidad pequeña y pobre desde la perspectiva económica y cultural, uno de los docentes en compañía de los alumnos, se dieron a la tarea de planificar las acciones desde las competencias que señala la asignatura denominada Práctica profesional. El otro profesor, fungió como asesor del proyecto.
Posteriormente, semana tras semana durante un semestre, con el apoyo de la Dirección de la licenciatura en educación, estudiantes y profesor concurrieron a la comunidad “Vista Hermosa”, para fortalecer los vacíos académicos de los niños de preescolar y primaria, así como la de los adultos.
Aunque la tarea era exigente, nuestros estudiantes, además de preparar las lecciones de la semana, se involucraron en la recolección de dinero, ropas y despensas a favor del proyecto.
Los esfuerzos anteriores, también requirieron de visitas a las autoridades del Gobierno para obtener materiales y recursos didácticos, los cuales al utilizarlos fueron complementados integrando la Fe adventista en la enseñanza y el aprendizaje de los miembros de la comunidad favorecida.
Al final de dicho semestre de actividades, se revelaron los frutos alcanzados mediante un programa especial ante las autoridades de la Universidad y del Gobierno.
Se entregó un certificado para la adulta que concluyó su educación Primaria, quien quedó motivada para continuar con los estudios de Secundaria. Dos adultas y un varón, aprendieron a leer y escribir; mientras que los niños de Preescolar y Primaria, avanzaron en el reforzamiento de sus habilidades de lectoescritura.
En total, fueron beneficiadas ocho familias. El evento culminó con bebidas y comidas típicas de la región en un ambiente de alegría y gratitud a Dios por el esfuerzo de los estudiantes, profesores y miembros de “Vista Hermosa”.
Para los estudiantes, la experiencia académica les generó satisfacción y motivación para seguir aprendiendo bajo el esquema de amor, educación y aprendizaje al necesitado. Los objetivos establecidos fueron alcanzados al vincularse con las necesidades de la gente. Desarrollaron sus habilidades profesionales en un contexto real, así como sensibilidad y empatía al ser canales de bendición para otros.
Por experiencia comprendieron que los aprendizajes logrados solo se obtienen con “diligencia, no perezosos; fervientes en espíritu, sirviendo al Señor” ( Romanos 12:11 ). Tú, ¿has tenido experiencias similares como profesor o estudiante? ¿Consideras que amar, educar y aprender transforma vidas?
Fuente: https://www.adventisteducators.org/
