“Esta cirugía me ha devuelto a la vida”, dijo Rene Galloway, de 52 años, una ex enfermera que trabajó en la sala de emergencia de AdventHealth Celebration.
La paciente tuvo nueve intervenciones quirúrgicas durante los últimos 13 años, lo cual la dejó obteniendo su alimentación por vía intravenosa (IV) en forma discontinua durante aproximadamente un año y medio. Por causa de sus muchas cirugías, los médicos le dijeron que era una mala candidata para cirugías futuras. El gastroenterólogo Kamibiz Kadkhodayan, del Centro de Endoscopía de Intervencionismo de AdventHealth, fue su último recurso.
La paciente Galloway se convirtió recientemente en la primera persona en el mundo que recibe un nuevo procedimiento llamado “Candy Cane” (Bastón de caramelo), por la forma que tiene el intestino delgado antes del procedimiento. Se reduce el tamaño de una porción problemática del intestino que parece el final curveado de un bastón de caramelo, a través del uso de un dispositivo endoscópico reconvertido. Este procedimiento es seguido por uno más, en el que se crea un canal para el alimento. Ambos procedimientos se llevan a cabo sin la necesidad de una cirugía tradicional, al usarse un endoscopio y otros dispositivos aprobados por la agencia FDA.
Después de discutir el procedimiento con la paciente Galloway y su esposo, el matrimonio tomó la decisión de seguir adelante con esa cirugía. Decidida a intentar cualquier cosa, la paciente se sometió a la primera de dos intervenciones consecutivas en marzo de 2023.
“Cuando el médico Kadkhodayan entró a la sala, se sentó con mi esposo y conmigo y se tomó el tiempo de dibujar esos esquemas que explicaban en detalle la cirugía y la forma en que iba a ayudarme en mi caso”, dijo la paciente Galloway. “Nunca había visto ese trato en un médico y ambos, mi esposo y yo, teníamos los ojos llenos de lágrimas, porque nos dimos cuenta de que el doctor Kadkhodayan estaba haciéndolo por mí y que haría lo que se necesitara para devolverme de nuevo a la vida normal”.
Utilizando un original procedimiento endoscópico de dos pasos, el doctor Kadkhodayan y su equipo fueron capaces de tratar la condición de la paciente Galloway, sin necesidad de ninguna incisión.
“Fuimos capaces de reconvertir dispositivos de gastroenterología aprobados por la FDA a fin de aplicar un procedimiento similar a la intervención quirúrgica, pero menos invasiva”, dijo el doctor Kadkhodayan.
Decir simplemente que los pasados meses han cambiado la vida de la paciente sería una infravaloración del hecho. Cuando se presentó en AdventHealth para su primer procedimiento, había estado en alimentación intravenosa por alrededor de tres meses porque no siempre podía retener la comida. Después de su segundo procedimiento, se fue del hospital y tomó su primera comida, saboreando cada bocado. Y ha sido capaz de tomar sus alimentos normalmente desde entonces.
“No tengo ya que llevar siempre conmigo la medicina contra la náusea, ni tener a mano bolsas de plástico en caso de tener que vomitar”, dijo la paciente Galloway. “Ya no tengo que depender de los mapas Google para planificar mi ruta basándome en si puedo encontrar estaciones de gas que cuenten con cuartos de baño”.
El síndrome Candy Cane se refiere a pacientes como la enfermera Galloway, que se han sometido a un bypass gástrico y desarrollado una significativa y algunas veces debilitadora molestia abdominal. Los síntomas se comienzan a presentar después de comer y con frecuencia solo se pueden aliviar al vomitar.
El equipo de cirugía celebró el acontecimiento en la sala de operaciones al darse cuenta de que habían creado una exitosa nueva opción de tratamiento para sus pacientes.
“Hemos podido ser capaces de ofrecer este tratamiento a cuatro pacientes más a los que también les ha ido bien con él”, dijo el gastroenterólogo Kadkhodayan. “No podría describir con palabras cuán gratificante y satisfactorio es para un médico saber que hemos dado con un procedimiento que puede ayudar a innumerables pacientes en el futuro”.
El médico Kadkhodayan le da crédito al enfoque multidisciplinario de AdventHealth por el éxito obtenido en este procedimiento revolucionario. El haber tenido a varios subespecialistas reunidos juntos para discutir la situación de la paciente Galloway hizo posible más innovación y mejoró la vida de sus pacientes.
“El doctor Kadkhodayan me dio esperanza. Se trataba de otro viaje al cuarto de baño para vomitar, de otro viaje al hospital; pero esta cirugía me ha permitido regresar a mi trabajo de tiempo completo y pasar de nuevo tiempo con mi familia. Puedo ahora salir a comer a un restaurante, tener comidas familiares e ir otra vez a la playa”, dijo la paciente Galloway.
Ha sido una jornada larga y algunas veces dolorosa para la paciente Galloway desde su primer bypass gástrico en 2009, pero ahora es capaz de retener la comida y llevar una vida más normal gracias a esta innovadora cirugía. Espera ser una paciente modelo y adoptar un estilo de vida más saludable después de la cirugía, consumiendo los alimentos apropiados y haciendo ejercicio a fin de gozar de su segunda oportunidad de vida.
Fuente: https://interamerica.org/es/
