En Malasia, más de 1,600 personas abrazan la fe en primera serie evangelizadora nacional

Noticias Adventistas 2023.09.16

La Iglesia Adventista del Séptimo Día en Malasia está de plácemes, celebrando, después de la exitosa conclusión de su serie evangelizadora Esperanza para Malasia, en la cual se dio la bienvenida a más de 1,600 personas que aceptaron la fe adventista a través del bautismo, dijeron los dirigentes de esa nación de Asia. Después de ver a tan gran multitud ansiosa de escuchar más acerca de Jesús, los organizadores dijeron que se sienten motivados a repetir esta ronda de iniciativas de evangelización.

La campaña de evangelización de una semana de duración dio comienzo el 18 de agosto en ciudades principales, tales como Kuala Lumpur, Kuching y Kota Kinabalu. Las reuniones tuvieron lugar en forma simultánea en más de 25 lugares en todo el país. Esperanza para Malasia tiene por objetivo promover el reavivamiento entre obreros y miembros de iglesia, en adoración unida, al mismo tiempo que llevar a cabo una iniciativa impactante en relación con la urgencia de las misiones urbanas.

“Este es un importante logro para Malasia”, dijo el presidente de la Unión Misión de Malasia,  Abel Bana. De acuerdo a su testimonio, fue muy alentador ver desarrollarse la primera iniciativa de evangelización adventista simultánea en todo el país. “No fue del todo fácil, pero el atravesar por toda esa historia e inspiración, hizo que nuestra iglesia en Malasia estuviera más espiritualmente motivada y procurara más cumplir la misión en este desafiante territorio”, añadió.

El clímax de esta serie nacional de evangelización tuvo lugar cuando miles de personas se congregaron en lugares designados de reunión para el Sábado de Celebración de la Cosecha. Un centro de adoración en Kuching, Sarawak, dio la bienvenida a más de 2,500 asistentes; mientras que en otras localidades en Kuala Lumpur, Sabah y Kota Kinabalu, se reunieron aproximadamente 1,500 personas en cada una, de la Misión Peninsular de Malasia y de la Misión Sabah, respectivamente.

Otras iglesias se reunieron también en lugares seleccionados para celebrar servicios regionales de adoración unida, informaron los dirigentes de la iglesia.

De acuerdo con el secretario de campo de la Unión Misión de Malasia, Francis Amer, el trabajo preliminar y la preparación del terreno comenzó con un reavivamiento de 10 días de oración y seminarios de enriquecimiento sobre oración en enero. Poco tiempo después, los dirigentes ofrecieron entrenamiento y seminarios sobre evangelización en grupos de atención, ministerio a través de teléfono celular y misión digital.

El secretario Amer dijo que él piensa que el éxito del programa es el resultado de esfuerzos unidos y de colaboración de parte de los dirigentes de todos los niveles de la organización de la iglesia. Y a pesar de las dificultades para organizar tan grande asamblea de creyentes, añadió que “es alentador ver la forma como nuestras iglesias en este país se movilizaron como si fueran una sola”.  “Creo personalmente que todo el programa fue un éxito porque … cada uno trabajó en forma unida y en colaboración”.

El reciente proyecto Esperanza para Malasia, de la Iglesia Adventista del Séptimo Día, puso de relieve su dedicación al movimiento Yo Iré, dijeron los dirigentes de la iglesia. “Este esfuerzo nacional demostró un incremento de la participación de los miembros de iglesia en la obra evangelizadora personal y pública, en alineación con el blanco de Todo Miembro Involucrado. Incluyó también misioneros de primera línea que hablaron en grandes reuniones, inspirando a las audiencias a participar en la predicación del evangelio”, dijeron.

Mientras la Iglesia Adventista del Séptimo Día en Malasia continúa trabajando en dar a conocer el mensaje de esperanza y salvación, los dirigentes de la iglesia invitan a todos a unirse en oración en favor de sus esfuerzos constantes. “Oren por favor mientras nos preparamos para más oportunidades de dar a conocer a Jesús a personas que desean abrazar su fe e iniciarse en una jornada espiritual”, dijeron.


Fuente: https://interamerica.org/es/