Según un estudio del gobierno de Brasil, la pobreza extrema en la región metropolitana de Porto Alegre, Rio Grande do Sul, ha aumentado un 85 por ciento en los últimos 10 años. Actualmente, la capital del estado más meridional de Brasil tiene casi 70.000 personas más en pobreza extrema que en 2012. Muchas de estas personas viven en favelas, en casas improvisadas hechas con restos de madera que sufren los efectos de la lluvia y el viento.
La conciencia sobre estos datos aleccionadores impulsó a un grupo de estudiantes de primaria de la Escuela Adventista de Porto Alegre y a sus maestros a asociarse con la organización sin fines de lucro Brasil Sem Frestas (“Brasil sin Brechas”) para ayudar a las familias en situaciones vulnerables, especialmente en tiempos de fuertes lluvias. y el frío, cubriendo sus casas de madera con cartones de leche cortados a la medida. Bajo el liderazgo de la maestra de escuela primaria Jozy Araújo, los estudiantes de tercer y cuarto grado comenzaron a recolectar cartones de leche de familiares y amigos.
“La idea era enseñar a los estudiantes sobre el amor y el respeto que debemos tener por todos los necesitados”, dijo Araújo. “Los estudiantes entendieron que cuando hacemos nuestra parte para ayudar a los demás, vivimos más felices y más unidos”.
El proyecto duró dos meses. Se lanzó con un programa especial en el que los estudiantes aprendieron sobre el proceso de recubrimiento de los cartones de leche, vieron fotografías del producto final y miraron videos que mostraban la reacción de las personas que se habían beneficiado de la iniciativa.
Los estudiantes terminaron recolectando 4.300 cartones de leche, suficientes para tres casas.
“Algunos estudiantes no pudieron traer cartones de leche, entonces los que pudieron trajeron el doble de cantidad”, dijo Araújo.
Visita Escolar
Al finalizar el proyecto, el equipo de Brasil Sem Frestas visitó el colegio adventista para recibir todas las donaciones de los estudiantes. Los voluntarios se sintieron conmovidos por la dedicación de los niños y la cantidad de cartones de leche recolectados.
“Se notaba que hubo mucho amor involucrado en el proceso de recaudación de fondos”, dijo la presidenta de Brasil Sem Frestas, Maria Luíza Camozzato. “Esta asociación es extremadamente importante para nuestro proyecto”.
Los estudiantes, familiares y personal no solo recogieron las cajas sino que también hicieron todo el trabajo de desinfectarlas y cortarlas adecuadamente para que estuvieran listas para ser utilizadas. Además de los cartones de leche, los estudiantes recolectaron tapas de botellas y las vendieron. Con el dinero recaudado compraron el hilo necesario para coser las cajas.
“El objetivo de nuestras escuelas es una educación que trascienda nuestras aulas para ser una bendición en la vida de las personas en nuestras comunidades”, dijo la coordinadora de enseñanza Juliana Oliveira. “Esta iniciativa fue sólo una de las muchas acciones que hemos implementado para mostrar esta creencia en la práctica”.
Fuente: https://www.adventistworld.org/
