Aquella tarde de verano, Noemí vestía unos pantalones cómodos y una camiseta polo en colores camuflaje, combinados con botas de campo marrones y un sombrero que parecía hecho para una película de aventuras. Mostró fósiles a grupos de adolescentes que la rodeaban, explicándoles qué eran, dónde fueron encontrados y qué nos enseñaron sobre la historia de la Tierra. Durante el Camporí, ofreció conocimiento y emoción mientras los jóvenes cavaban cuidadosamente en la arena en busca de pequeños y afilados dientes de tiburón, encontrados en Marruecos, como aprendices de arqueólogos. Los dientes eran reales y la emoción era notoria, pero lo más importante era que En la mente de estos Conquistadores se despertó un interés por la Creación y la Ciencia.
A lo largo de su entrevista, Noemí habla de los orígenes de su interés por la biología, su pasión por estudiar los animales y la naturaleza, la importancia de la educación en el hogar y en la escuela y cómo faltan jóvenes cristianos interesados en dedicarse a la ciencia.
Noemí tiene un doctorado. Es licenciada en biología, especializada en educación socioambiental y magíster en zoología. Su principal estudio estuvo dedicado a proyectos de conservación de tortugas en el Golfo de Fonseca, en la costa del Pacífico de Centroamérica. Hoy es directora de la rama europea del Instituto de Investigación en Geociencias, una organización apoyada por la Iglesia Adventista para el estudio de las ciencias de la Tierra y la naturaleza.
La perspectiva desde la que observamos la naturaleza marca una diferencia fundamental en la idea que tenemos de ella. Y observar la naturaleza desde la perspectiva de la Creación nos ayuda a profundizar nuestro conocimiento y comprensión de un Dios de maravillas. Esta entrevista es una contribución a esa revelación.
Entrevista a Noemí Durán, científica de la División Intereuropea del Instituto de Investigación en Geociencias, con sede en Sagunto, España . Sus palabras revelan cómo el estudio científico nos ayuda a comprender el amor, el cuidado y la creatividad de Dios por nuestro planeta.
Fuente: https://news.eud.adventist.org/en/
