Buscando tener unas vacaciones diferentes, un grupo de misioneros provenientes de Brasil ha llegado a Paraguay para llevar a cabo una misión sin fronteras que busca transformar vidas y comunidades. Son médicos, miembros de iglesia, alumnos y maestros de la Red Adventista de Mato Grosso do Sul, y han dejado sus hogares por seis días para embarcarse en esta aventura, trayendo consigo un mensaje de esperanza y una determinación incansable para ayudar a aquellos que más lo necesitan.
“Me interesé por esta actividad porque muchas veces en la escuela vemos videos de viajes misioneros. I will go, fue la primera misión que me interesó. Fue ahí que sentí una conexión con Dios y recibí el llamado de ayudar a llevar la palabra a otras personas. Ese deseo continúa en mi corazón, por eso decidí participar de esta misión. Mencionó Leonardo Kanashiro, estudiante del Colegio Adventista Campo-Grandense.
Misioneros en acción
Llegaron el domingo 09 de julio, desde el primer día, su labor se ha centrado en impactar la comunidad por medio de la colonia de vacaciones, atención médica y psicológica, capacitaciones, limpieza y refacción de la Escuela Adventista de La Paloma. También han visitado a los vecinos para invitarlos a las actividades, mientras comparten el libro misionero “El Gran Conflicto”.
Otras de la actividades que están realizando es la limpieza de las aulas, restauración de la cancha deportiva y la construcción del techo del tinglado de la escuela, mejorando las instalaciones y creando un entorno más propicio para el aprendizaje de los niños. Demostrando que el amor y la solidaridad no conocen fronteras.
Experiencia inolvidable
Esta experiencia está siendo única e inolvidable para los alumnos, tal como lo mencionan Evillyn Santos y Maria Eduarda Lima, estudiantes del Colegio Adventista Jardim dos Estados. “Al salir de nuestra de zona confort, nosotros conseguimos aprender mucho e interiorizar lecciones para nuestra vida. Además podemos aprovechar nuestras vacaciones para ayudar al prójimo. Aquí en Paraguay, las personas son muy receptivas, fueron muy agradables. Tuvimos la oportunidad de conversar y orar con ellos, fue muy bueno”.
Su misión en Paraguay está dejado una huella indeleble en el corazón de la comunidad y ha recordado a todos la importancia de extender una mano amiga hacia aquellos que más lo necesitan.
“Esperamos que esta iniciativa inspire a más personas a unirse en esfuerzos similares, recordándonos que cada pequeño acto de bondad puede tener un impacto duradero en la vida de los demás, trascendiendo barreras geográficas y culturales”, declaró Levi Leite, Director de Educación Adventista de la Unión Paraguaya.
Fuente: https://noticias.adventistas.org/es
