Los Conquistadores son desafiados a usar el poder que Dios les ha dado para cumplir la misión

Noticias Adventistas 2023.04.15

“Ustedes no pertenecen al movimiento de jóvenes [de la iglesia] si la humildad no forma parte de sus vidas”, dijo el pastor Busi Khumalo, director de ministerios juveniles de la Asociación General de los Adventistas del Séptimo Día. Khumalo se dirigió a los miles de Conquistadores y líderes de jóvenes, en el último día del Camporee de Conquistadores de la División Interamericana en Trelawny, Jamaica, el 8 de abril de 2023. “Tienen que ser siervos de Dios”, dijo.

Ser siervos de Dios significa ser participantes activos en la misión de la iglesia, con la convicción y la determinación de compartir el amor de Dios, añadió. Al igual que Jotam en la historia bíblica registrada en Jueces el capítulo 9, “tienen que ser osados por Jesús”, dijo. “Si están sufriendo de una baja autoestima, si tienen problemas de identidad, o si creen que no tienen poder, los desafío a volver a pensarlo”. Khumalo recordó a la joven delegación que Dios creó a cada uno para ser poderoso, para ejercer influencia sobre los demás, y los animó a canalizar correctamente ese poder dado por Dios en pro del cumplimiento de la misión.

El lema del camporee, “Conquistadores en Misión”, significa ser jóvenes valientes y piadosos, llenos de sabiduría, expresó. “Cuando somos valientes para reprender el pecado, tenemos que hacerlo con amor, sabiduría y diplomacia, como lo hizo Jotam cuando se dirigió a su hermano Abimelec”.

“Que la verdad sea dicha como debe ser, pero que las palabras sean un bálsamo”, dijo Khumali. “No sean una zarza de espinos, como expresa el pasaje. “No sean arrogantes y orgullosos. Hagan las cosas de manera honorable”.

Los Conquistadores recibieron el desafío de no solo cumplir con lo que se espera al vestirse con sus uniformes, o participar en destrezas de marcha y actividades del club que parecen interesantes y que son partes importantes de los valores enseñados. Todo eso es un medio para un fin, y el fin es llevar a los jóvenes hacia Cristo y estar comprometidos con la misión de la iglesia. “Tienen que ser parte de la misión de la iglesia. No tiene que ver tan solo con ser bautizados; tienen que ir a cumplir las tareas encomendadas por Dios”, dijo Khumali.

“Sean misioneros en su calle, en su vecindario, en el extranjero, en otro continente, en el colegio, en el trabajo, en todas partes”, dijo Khumalo. “Si están compartiendo a Jesús, eso significa que son misioneros allí donde les toque estar”. Recordó a los jóvenes que tienen que usar la Palabra de Dios para hablar la verdad con valentía, pero con amor. “Los líderes de la iglesia que los rodean no pueden alcanzar a sus amigos y compañeros; solo ustedes pueden hablar el lenguaje de la juventud. Nos llaman “viejos”, pero ustedes son la persona correcta para contarle a otros que Jesús los ama en su propio estilo, de su propia manera como jóvenes que son hoy”.

Cientos de Conquistadores y líderes de jóvenes avanzaron hacia el escenario del frente durante la invitación del pastor Khumalo de comprometerse a ser misioneros fieles al regresar a sus hogares y seguir adelante con sus vidas.

El culto de adoración de la mañana también incluyó una gran ceremonia donde fueron bautizados treinta Conquistadores.

Fernanda García, de 12 años, fue una de los más de dos decenas de Conquistadores que fueron bautizados. “No había decidido bautizarme, pero lo hice”, dijo Fernanda. Estuvo acompañada de sus padres y de su hermano de 7 años, que son de Campeche, México. Realizaron el viaje al campamento con el resto de los miembros del club y los líderes de la Unión Mexicana del Sureste. Sus padres no son adventistas, pero quisieron acompañar a su hija en este largo viaje. “Ella aprendió mucho en el club, y nos sentimos felices de estar entre tantos cristianos”, dijo Jacqueline, la madre de Fernanda. Fernando, el padre de Fernanda, dijo que después que su hija asistió unos días antes a una clase de especialidad sobre cómo llamar a las puertas para compartir el evangelio, tomó la decisión de bautizarse.

Viajar al camporee les demandó dedicarse a recaudar algunos fondos y la ayuda de sus padres, dijo Fernanda. Ella se ha hecho de nuevos amigos de Colombia, Jamaica, Venezuela y de otros países. Es una experiencia que nunca olvidaremos”, dijo Jacqueline.

“Por lo general vemos a los Conquistadores en la edad perfecta para tomar una decisión por el bautismo, entre los 10 y 15 años, dijo Víctor Martínez, director de ministerios jóvenes de la Unión Mexicana del Sureste. “A esa edad tierna, los niños y los adolescentes aún tienen un sentido de asombro, inocencia y espiritualidad”, dijo. “Están abiertos a escuchar la voz de Dios”. Dios tocó su corazón este fin de semana, y nos sentimos felices por ello.

Martínez se agradó al enterarse de la decisión de Fernanda de ser bautizada en el camporee en el día de hoy. Ella era la única del grupo que aún no había sido bautizada, dijo. “Ellos no olvidarán jamás la experiencia que tuvieron aquí”. Los líderes esperan bautizar a decenas más para el final del día.


Fuente: https://interamerica.org/es/