Los Conquistadores intercambian en el Campore botones conmemorativos y sueños

Noticias Adventistas 2023.04.08

Los Conquistadores saben que, si hay algo que siempre debe estar inmaculado, es el uniforme. Desde la camisa o la blusa blanca, hasta los pantalones kaki, el cinturón, la pañoleta con las insignias de honores, los broches o botones distintivos, las barras y los galones de rango, todo debe estar perfectamente colocado como lo indica el Manual de Conquistadores.

Y como en todo camporee, los Conquistadores procuran algo extra especial en el Camporee 2023 que les ayude a sobresalir. Este año, la División Interamericana (DIA) ha preparado una insignia y un botón conmemorativos disponibles para los asistentes. Algunos de los artículos relacionados con el uniforme se pueden obtener solamente durante un camporee; así que muchos Conquistadores intercambian esos artículos coleccionables a fin de obtener cierto codiciable broche o botón a fin de completar su colección especial.

Eso puede observarse, por ejemplo, en el caso de Edier Gil, de la Iglesia Adventista Ebenezer de  Colombia, el cual viste un chaleco lleno de botones o broches conmemorativos adquiridos en tres reuniones internacionales de camporee de Conquistadores y tres reuniones de camporee de la DIA. “Tengo muchos, muchos más; unos 300 botones y unas 300 insignias”, dijo al mostrar entusiastamente sus muchos botones. No los traje todos, porque me los quitarían en el aeropuerto.

“Esto se ha convertido en frenesí en los últimos años”, dijo el joven Edier mientras posaba al lado de su hermano Edgardo Gil. Este día se encuentra vendiendo broches o botones en el Camporee.

Varios clubes de Conquistadores trajeron al campamento sus propios botones. Algunos diseños incorporan elementos del logo del tema “Conquistadores en Misión”, que ilustra la historia bíblica de Gedeón tocando el cuerno de la victoria.

Tradicionalmente, las uniones y asociaciones crean su propio diseño o colección. Se da además la oportunidad a los negociantes o distribuidores, de mezclarse entre los Conquistadores dentro del campamento, como parte de la distribución de sus botones.

También los clubes locales crean broches o botones para sus Conquistadores a fin de que los intercambien o los conserven como souvenir. Los Conquistadores colectan tales botones, ya sea por compra o por intercambio; pero mayormente a través de intercambio, lo cual es grandemente alentado por los dirigentes de Conquistadores. El proceso de intercambio les brinda a los Conquistadores oportunidades de desarrollar habilidades interpersonales y a identificarse con otros territorios.

“Vivimos en un mundo en el todos estamos desconectados unos de otros; aun cuando tenemos instrumentos para permanecer conectados. El intercambio requiere que la persona tenga contacto visual, que haga un lado su nerviosismo y que eche mano de un poco de valor para acercarse a otros”, dijo el coleccionista Edier.

Una vez que los botones o broches se han intercambiado, los Conquistadores los llevarán en la banda de su uniforme, o los colocarán en sus gorras, sombreros o chalecos que compraron exclusivamente para colocar tales botones. Otros guardan sus botones en álbumes. “Al coleccionar botones conmemorativos, los Conquistadores están coleccionando recuerdos”, explicó uno de ellos.

Los broches o botones conmemorativos aparecieron por primera vez al principio de la década de 1990. Desde entonces, la producción y subsecuente intercambio de tales botones ha aumentado en forma exponencial. En 2014, se creó el nuevo honor de “Intercambio de Botones”, a fin de ayudar a los Conquistadores a entender los principios que gobiernan el proceso de intercambio, en un esfuerzo por ayudarlos a crecer espiritualmente.

El honor de intercambio de botones explica la cultura en torno a tales botones. Les da a los Conquistadores y al personal una idea sobre cómo se debe enfocar este intercambio. Los Conquistadores aprenden cómo medir el valor de un botón y cómo tener una buena interacción. Este honor está también diseñado para comprender el aspecto comunitario de intercambiar algo de valor. No se trata solamente de tomar un botón simplemente porque te gusta. Es un acto de colaboración, de coparticipación.

“Deseamos que se diviertan con ello; pero no queremos que pierdan de vista el verdadero valor del intercambio”, dijo el pastor Durwin Clarke, de la Asociación Sur del Caribe, de la Unión de Caribe. El blanco es obtener una más rica experiencia del camporee al llegar a conocerse mutuamente”, dijo.


Fuente: https://interamerica.org/es/