Alfombras para la Humanidad

Noticias Adventistas 2022.12.06

Sus dedos agarran firmemente ambos extremos del algodón morado mientras tira del material en direcciones opuestas para formar un nudo. Esta moción conocida le ha valido a Sue Hummel casi CA$5,500 (alrededor de US$4,100) para la Agencia Adventista de Desarrollo y Recursos Asistenciales (ADRA) de Canadá. Con una sonrisa en su rostro, Hummel orgullosamente sostiene su alfombra completa con un ombré de telas violetas, lavanda y blancas.

“He estado haciendo alfombras durante los últimos seis años, y hoy acabo de terminar mi octogésimo sexta alfombra”, dice.

Hummel hizo su primera alfombra en 2015 para amueblar su casa después de mudarse a Nueva Escocia, Canadá. Hizo una alfombra adicional para una amiga, quien con entusiasmo compartió la creación con sus amigas. A lo largo de los años, las noticias de sus diseños se difundieron por la ciudad local a través del boca a boca.

“Cuando estoy de humor, selecciono los colores que quiero y empiezo a anudar”, dice. “Pero se requiere tiempo y paciencia para armar el producto”.

El proceso de elaboración de la alfombra puede durar hasta 36 horas. Según Sue, la preparación requiere más tiempo que el montaje. Todos los proyectos de Sue comienzan con las camisetas que le donan.

“Recojo mis materiales como un pintor recoge tubos de pintura”, dice Hummel. “Cada artículo tiene que ser clasificado por tono y color”.

Hummel corta las camisetas clasificadas en tiras de 15 centímetros (seis pulgadas) y se deshace de las costuras y costuras. Luego toma la decisión artística de seleccionar varios colores para diseñar la alfombra. Cuando todos los materiales están listos, Hummel pone un podcast para escuchar y comienza a anudar. Una alfombra de tamaño medio mide alrededor de dos por un pie y medio (60 por 45 cm) Cuando la alfombra está completa, Hummel va al mercado local a buscar un comprador.

“Ir al mercado es una buena oportunidad para hablar con la gente y contarles sobre mis alfombras y la organización benéfica para la que estoy recaudando dinero”, dice.

ADRA es una organización sin fines de lucro que brinda atención médica y educación en más de 100 países. Las donaciones como la ayuda de Hummel brindan a las personas acceso a agua limpia, útiles escolares, alimentos adecuados y ayuda en casos de desastre.

Hummel dona el 100 por ciento de las ganancias directamente a ADRA. Ella está trabajando para lograr su objetivo de recaudar CA $ 6,000 (US $ 4,500) para fines de 2022. Mientras sus manos estén dispuestas, dice Hummel, continuará haciendo alfombras para caridad.

“Dios diseña; Solo ato los nudos”, dice ella. “No planeo parar. Es un proceso continuo”.


Fuente: https://www.adventistworld.org/