Una familia diversa de la iglesia se une en la iglesia ruso-estadounidense

Noticias Adventistas 2022.04.01

En Glendale, California, una congregación ruso-estadounidense de casi 100 miembros está adoptando la comunidad y la unidad en estos tiempos especialmente difíciles.

Dentro de esta diversa familia de la iglesia existen 15 nacionalidades, incluidas la rusa, la ucraniana, la armenia, la georgiana, la bielorrusa y más, adorando juntas cada semana.

Los servicios son en ruso, sin embargo, los miembros y visitantes de muchos países comparten saludos de sus familias y se unen en oración por su bienestar y seguridad.

Anatoliy Gurduiala, pastor principal de la congregación desde 2010, es ucraniano. En un sermón reciente, enfatizó lo que los cristianos deben hacer durante este tiempo. Animó a los presentes a recordar que nuestra ciudadanía está en los cielos, como nos recuerda Pablo en Filipenses 3:20. Como cristianos, ciudadanos del cielo, debemos llevar luz a la vida de otras personas.

Gurduiala revisó la historia de Eliseo y los arameos en 2 Reyes 6:10-23. También se refirió al desafiante mensaje de Mateo 5:44 de amar a nuestros enemigos. Aunque hoy no somos perfectos, debemos esforzarnos por amar incluso a aquellos que nos están lastimando. “Eso es lo que hace que los cristianos sean diferentes”, señaló el pastor Gurduiala. La nacionalidad no importa en la familia de una iglesia: todos somos hijos de Dios.

Para terminar, Gurduiala recurrió a Gálatas 5:20-22. Hay momentos en que pensamos que no hemos pecado porque no matamos o cometimos otro “pecado grande”, pero fomentar un espíritu de desunión también es pecado. El mensaje del amor cristiano desinteresado, incluso en medio del dolor, es importante y oportuno para la iglesia de hoy.

A lo largo del servicio, mientras los miembros compartían, oraban y compartían juntos, se hizo evidente una sensación de apoyo profundo y unificado para el pueblo de Ucrania.

Los miembros compartieron historias personales de lo que están experimentando sus familias a medida que continúa la guerra y los peligros que enfrentan cada día.

Nuestros corazones están con esta congregación y sus familias que están sufriendo durante estos tiempos impensables. Que sigamos levantando en oración a los miembros y las familias de esta iglesia, así como a nuestros hermanos y hermanas en todas partes que se ven afectados por esta trágica guerra.

Por: Conferencia del Sur de California


Fuente: https://www.nadadventist.org/